Un implante dental es un pequeño tornillo de titanio que se une al hueso de la mandíbula o maxilar formando lo que será la raíz del nuevo diente. Una vez que el tornillo, o nueva raíz se ha integrado perfectamente en el hueso, se procederá a colocar la corona individual o el puente, en función del número de implantes colocados.
Por tanto, los implantes hacen el papel de dientes nuevos, devolviendo la funcionalidad y la estética que los dientes nuevos suponen. Pues el implante dental está creado para la sustitución de uno o más dientes, ya que funcionan igual que una pieza perdida.
Paso a paso del tratamiento
1. Estudio y planificación
Realizamos un plan determinado para cada paciente. Lo realizamos mediante radiografías, una tomografía computerizada en 3 dimensiones y modelos de la boca. Luego determinamos el número de implantes dentales, su posición y tamaño que colocaremos.
2. Colocación de los implantes
Se colocan en clínica, con anestesia local. En muchas ocasiones, utilizamos una técnica mínimamente invasiva, sin ser necesario abrir la encía, ni la colocación de puntos.
3. Periodo de osteointegración
Es el periodo de cicatrización, en el cual los implantes dentales se unen al hueso, es distinto para cada persona. No obstante, durante este periodo, usted podrá llevar coronas o puentes de carácter provisional, para que en ningún momento vaya sin dientes.
4. Colocación de dientes definitivos
Una vez cicatrizados los implantes dentales, se tomará una impresión a los implantes, para obtener un modelo y realizar una corona o un puente, según las necesidades. Estas coronas irán atornilladas o cementadas a los implantes dentales. Obteniendo una rehabilitación con implantes dentales y coronas fijas.